martes, 9 de diciembre de 2014

Secuelas del maltrato

En numerosa literatura encontramos que, la mujer víctima de violencia familiar necesita disponer de una red social en la que apoyarse y con la que comunicar, con mayor o menor grado de intimidad la experiencia de sufrimiento y sus sentimientos de fracaso, vacío, engaño, desesperanza, etc. 

Cuando las vivencias negativas se verbalizan y son escuchadas por otros que las analizan desde otro punto de vista, ganan alivio. Aunque se habla de perfiles de víctimas y victimarios en el ámbito de la violencia familiar, a mi me gusta resaltar la parte relacional del problema, en donde ambas partes van construyendo un estilo de respuesta, que en el caso del maltrato, debe cesar. 

En el ámbito de las relaciones interpersonales, la conducta violenta es sinónimo de abuso de poder, en tanto y en cuanto el poder es utilizado para ocasionar daño a otra persona, es por ellos que un vínculo caracterizado por el ejercicio de la violencia de una persona hacia otra, se denomina relación de abuso. El problema no es la víctima, es un sistema de respuestas que se han aprendido, desde el aprendizaje vicario de la infancia, llevando este estilo de respuesta a un estado de indefensión y necesidad de recuperar el poder. 
Uno una se relaciona con los demás, como sabe, como puede, y seguramente no como a uno una le gustaría; y con todo, se puede aprender un estilo de respuesta, que proteja más. Es un aprendizaje que requiere de ayuda psicoterapéutica y de un esfuerzo por querer cambiar el estilo de respuesta. Identificar respuestas que inician y/o avanzan, una escalada simétrica con resultado dañino; también aquellas que mantienen una complementariedad rígida de comunicación.

El estilo de respuesta aprendido y/o reforzado en una relación de maltrato, podría verse como una secuela la cual habría que tratar.

No somos sólo el resultado de nuestras experiencias vividas y contadas sino también la suma de nuestras capacidades y potencialidades para redefinir esas experiencias pasadas y darles un nuevo significado que nos permita seguir adelante. Podemos encontra diferentes interpretaciones a lo que nos ha ocurrido, que nos permitan sentir más poder sobre nosotros mismos. 


La secuela del maltrato conlleva una sintomatología tal que debe ser atendida y tratada, no sólo desde el modelo médico y conductual, también,  desde una perspectiva relacional.