martes, 2 de abril de 2013

Extrañas adicciones.

  En los últimos meses, me encuentro entre la prensa escrita (1), y documentales (2), información que hace referencia a este asombroso número del 21% de riesgo de adicción a las nuevas tecnologías entre la población adolescente. 

  No sólo las nuevas tecnologías atraen la atención, también se está "destapando" toda una tipología de conductas adictivas "extrañas" (3), que aunque siempre han estado ahí, en la actualidad, programas diseñados para llamar la atención, están visibilizando. Como en el programa "My Strange Addiction", cuya finalidad entiendo que es aumentar la audiencia, pero que a la vez tiene la oportunidad de dirigir el contenido hacia la prevención de conductas adictivas.

  Porque esta es la oportunidad, y el deber, que tenemos los adultos para educar a la población infantil y adolescente. Siempre en el tema de adicciones me viene a la cabeza, "información es poder", y para nuestros jóvenes puede ser incluso un salvavidas.

  En otra entrada escribiré de cómo se va generando la adicción de forma insidiosa y sus factores predisponentes. Al ser una enfermedad multicausal, su abordaje es complejo.

  Pero como mi atención está dirigida a nuestros niños y adolescentes, me pongo en el lado de los padres y me pregunto: ¿cómo podemos combatir desde casa a este "monstruo" insidioso que se llama "conducta adictiva"?, ¿cómo puedo darme cuenta que mi hijo o hija se está enganchando a algo?.

  Donde más información vamos a obtener es asistiendo a talleres grupales de padres, y/o consultas a profesionales donde se pueda personalizar el caso familiar y obtener toda la información necesaria para hacer un buen diagnóstico y plantear unos objetivos concretos de trabajo. 

  Aún así, hay unos mínimos de información que nos puede ayudar a identificar señales de alarma. NO son excluyentes, y deben de tomarse como señales de alarma de que algo está pasando, no tiene que ser una adicción pero puede que algo le esté pasando a nuestro hijo o hija. 

  Algunas señales de alarma. Desde la prevención:
  •  Estar atentos a cambios de conducta, bruscos y poco tiempo.
  • Cambio repentino de amigos. Cuando empezamos a  darnos cuenta que no conocemos a los nuevos amigos de nuestro hijo o hija.
  • Conducta evitativa. Evita conversaciones, evita mirarnos a los ojos, no participar en actividades familiares, encerrarse en el cuarto, etc. 
  • Olor extraño en la ropa. 
  • Objetos nuevos por la habitación que no habíamos visto antes, ej: bolsitas pequeñas. 
  • Cambio de caracter, más agresivos (en las formas y verbalmente).
  • Aumento de las mentiras.
  • Ausentismo escolar, laboral.
 A partir de aquí, tenemos que reaccionar y en vez de confrontarnos con nuestro hijos, buscar más información.

 En la próxima entrada expondré, cómo iniciar una conversación con nuestros hijos para hablar del tema de las adicciones. 





Los adolescentes se comen el mundo. Hay que ayudarles a que el mundo no se los coman a ellos. 




Os adjunto también un artículo de la revista del Colegio Oficial de Psicólogos, donde dice que más de la mitad de usuarios se considera adicto a Internet.

Más de la mitad de usuarios se considera adicto a Internet.

También he encontrado este artículo.
Una app ayuda a vigilar a tus hijos en su uso de Internet.

3 comentarios:

  1. Gracias Sonia. Muy interesante el artículo, los enlaces y los puntos de prevención.
    Me quedo esperando ese inicio de conversación para tomar apuntes.
    Besos.

    ResponderEliminar
  2. Gracias, me alegro que os guste, hermanas. Os animo a seguir leyendo. Besos.

    ResponderEliminar